Torre de los Valdés
En San Cucao, perteneciente a la parroquia de San Cucufate de Llanera del concejo de Llanera, se encuentra la Torre de los Valdés, también conocida como Castillo de San Cucao
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| Torre de los Valdés |
Tanto la torre como el cuerpo rectangular añadido han sufrido reformas y restauraciones que han configurado la construcción actual, la cual parece corresponder a los siglos XIX y XX.
En un rápido análisis se distinguen los siguientes elementos:
- Torre de planta cuadrada, de tres pisos, rematada con almenas y garitas cilíndricas. Ventanas con celosías y ventanas tipo saeteras, una de ellas con tres escudos de armas en la parte superior, alguna otra de estas pequeñas ventanas también cuenta con escudo. Estas ventanas con escudos y la estructura de la torre son las únicas que perduran de su construcción original.
- Cuerpo rectangular adosado con dos plantas y desván. Con vanos adintelados en la planta inferior y apuntados en la superior. Rematado con almenas y garitas igual que la torre.
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| Descripción |
Esta torre, como todo castillo medieval que se precie, también tiene su leyenda, tal y como nos detalla el panel mencionado:
Se relata en viejas historias que Don Diego Menéndez de Valdés, a quien con razón apodaban "El Valiente", dueño y señor de la Torre de San Cucao, se negó a prestar auxilio a Don Enrique de Trastámara, quien luchaba por el trono de España contra su hermano el Rey Don Pedro. Cuando murió el Rey y Enrique subió al trono, Don Diego fue perseguido. Tal fue la saña de la persecución, que para salvar su vida, se vio obligado el noble caballero asturiano a recluirse en un monasterio de Galicia. Pasados los años, y durante unas fiestas reales que se celebraban en Valladolid, hubo luchas (suponemos que serían grecorromanas), en las que los guerreros españoles fueron derrotados por los franceses. Pidió entonces el monarca nuevos caballeros que tomaran parte en las luchas. Así, se présentó en la plaza un caballero vestido de negro y con el rostro cubierto por la visera del casco. Uno a uno fue derrotando a los caballeros galos, por lo que tuvo gran satisfacción del Rey. Terminado el espectáculo, llamó el monarca al desconocido caballero, a quien preguntó quién era: "Soy un antiguo vasallo de vuestra Majestad, que no os quiso dar posada ni ayuda cuando Vos la demandasteis en San Cucao de Llanera, mi casa está arrasada y mis tierras sembradas de sal." El Rey, como premio a su valentía, le devolvió sus tierras con el perdón. Don Diego volvió a Llanera y reedificó su Torre en el solar de la que hablando desmantelada por orden de Don Enrique de Trastámara.
Y para concluir en lo que respecta a este conjunto arquitectónico, comentar que actualmente el Castillo de San Cucao es un lugar de celebración de eventos.
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| Castillo de San Cucao |
